A un año de que el gobierno federal decretó la extinción de Luz y Fuerza del Centro, los argumentos del presidente Felipe Calderón se han caído, pues las condiciones de la industria eléctrica son “críticas”.

Martín Esparza, secretario general del Sindicato Mexicano de Electricistas, señaló que hasta el 11 de octubre de 2009 se tenían detectadas 22 zonas críticas, las cuales han aumentado debido a la ineficiencia de la Comisión Federal de Electricidad.

En entrevista aseguró que las motivaciones por las que se decretó la extinción de LFC sólo fueron “mentiras” para legitimar una administración “fallida”.

Antes del decreto ilegal de extinción, que inició con la toma de las instalaciones a través de la fuerza armada y militar, había 22 zonas críticas de LFC y está dentro del informe de la autoevaluación al cierre de 2008; ahora ya son 26 zonas críticas. Además, tienen quema de subestaciones, como en Cuauhtémoc, Ecatepec y Coyoacán, cuentan con más de 40 por ciento de explosiones en las bóvedas de cableado subterráneo, quemas de restauradores de interruptores. Prácticamente hay fallas en todas las zonas de cableado que controlaba LFC de manera permanente y que ponen en riesgo el suministro de energía de la zona central del país, además de que es una bomba de tiempo para la ciudadanía.

A esto se le suma un descontento, no sólo en la zona de atención, sino en todo el país, por el incremento a las tarifas eléctricas derivadas del retiro del subsidio que tenía la tarifa eléctrica. Fue mentira que iban a mejorar la calidad y bajar las tarifas, no es así. En todos nuestros centros de trabajo se utilizan como cuarteles de PF y del EMP, y del Ejército tomando las instalaciones, entonces todos estos mecanismos de seguridad pública, lo terminan pagando los propios usuarios con tarifas caras y los altos impuestos que se cobran para destinar a tener cuarteles en los 89 centros de trabajo, un error táctico y estratégico, por lo que tiene que rendir cuentas el presidente Calderón antes de que se marche.

Es buena, los usuarios nos reciben el volante, nos escuchan, explicamos que al SME lo convirtieron en un movimiento social. Ahora organizaremos a los usuarios del país para defender la industria eléctrica y vamos a continuar en los tribunales nacionales e internacionales las denuncias por el abuso de autoridad de Felipe Calderón.

A los que optaron por las migajas del gobierno, les digo que el tiempo es el mejor juez y los pondrá en su lugar. Alejandro Muñoz ahora no sabe qué explicarle a la gente que confió en él, que no puede hacer nada, pero debilitó al movimiento, lo encauzó.

Mi único interés es reinsertar a los 16 mil 300 trabajadores que no estamos liquidados, los inmuebles son patrimonio de los trabajadores, no de Martín Esparza, los recursos no importan, sino la fuente de trabajo.

Vamos a continuar porque se restablezca la legalidad y el estado de derecho, no nacimos ayer, tenemos 96 años de vida, a un año vamos a continuar, nos respalda la solidaridad nacional e internacional.