“La SFP alienta un quebranto en la CFE”


2011-07-12 

Al tomar la decisión de suspender unilateralmente la compra de un combustible alterno para centrales eléctricas en el norte del país mediante una auditoría y regresar al viejo esquema de uso de diésel de Pemex, “la Secretaría de la Función Pública está alentando un quebranto a la Comisión Federal de Electricidad”, deploró César Cadena, directivo de Energex.


Su empresa, que por cuatro años abasteció a la Comisión Federal de Electricidad de un combustible especialmente diseñado para reemplazar el diésel en las centrales Carbón II y José López Portillo de Coahuila, se ha mantenido desde principios de este año entrampada en un laberíntico proceso burocrático, mediante el cual la SFP literalmente desechó el uso del compuesto, pese a que reportaba ahorros para el erario.

“Aquí hay algo raro”, advirtió. Hasta el momento, no se les ha dado una razón concreta de por qué la suspensión.

MILENIO reveló en su edición de ayer que, por órdenes de la SFP, se suspendió el uso de una fórmula diseñada por ingenieros mexicanos que había reportado altos ahorros para la CFE en el proceso de ignición de centrales térmicas en Coahuila, un programa piloto que pudo extenderse al resto del país con ahorros millonarios.

Cadena advierte que, con base a las cifras que proporcionó la CFE a Energex, se generó un ahorro de 378 millones de pesos en tanto se mantuvo el uso del compuesto alterno, en especial si se le compara con el diésel tradicional: las plantas consumieron 49 millones 500 mil litros de ese combustible en el periodo de febrero a diciembre de 2006, contra sólo 17 millones de su fórmula en el mismo lapso en 2007.

“Entonces, si se compara, está claro y contundente que el daño patrimonial anual para la CFE es de 31 millones 500 mil litros en el periodo de febrero a diciembre de 2006”, señaló.

“¿A dónde están yendo a parar los otros litros? Es un daño total de 297 millones de pesos. ¿A dónde está yendo a parar ese dinero?”

Cadena sostuvo que las matemáticas de la Función Pública no cuadran: si con el compuesto alterno se ahorraban recursos y se necesitaban menos litros —además de desincentivar el robo de combustible—¿por qué regresar a la compra de diésel normal?

“No es comprensible. Pero las compras se mantienen suspendidas, sin que se dé una razón al respecto”, dijo el empresario.

¿Qué fue lo que sucedió con la venta del combustible alterno?
Nuestra empresa se dedica a la venta de combustibles. Nosotros le vendemos un combustible para flama abierta a la Comisión Federal de Electricidad en las carboeléctricas, pero debido a una investigación del órgano interno, una investigación que tiene más de 15 meses, mientras dure suspendieron la compra, a pesar de que la CFE reconoce que tiene ahorros de más de 106 millones de pesos en el uso de nuestro combustible.

¿Le han explicado por qué se les investiga?
Esa es la parte complicada, porque mientras dure la investigación, el funcionario de la CFE no puede regresar a comprar el producto, entonces se regresan a los combustibles anteriores, que era el diésel, que era el que se sustraía de las centrales.

¿Pero qué se aduce de esta suspensión?
Exclusivamente una supuesta investigación del combustible alterno, de todas sus cualidades, pero la ley es muy clara, en este sentido el funcionario de CFE mientras dure la investigación, no puede reanudar la compra de estos combustibles, a pesar de que hay un perjuicio claro para la economía de CFE. Y quiero decirlo: aquí ha habido un hostigamiento por parte de la SFP hacia la empresa, a funcionarios, todo encaminado a que no compren el compuesto y retornar al menos eficiente diésel.

¿Y cuáles eran los problemas del combustible? ¿Dañaba la maquinaria?
Ante esta duda se hizo la consulta al IFAI para tener una opinión imparcial y se reconoce que hay un ahorro de 106 millones de pesos, que no hubo ningún aumento en los costos de mantenimiento, ni se le provocó ningún daño a ninguna de las centrales.

¿Por qué regresar al diésel entonces?
Precisamente esa es nuestra queja. Para nosotros la Función Pública es la responsable de que este producto no se esté concumiendo. Aparentemente, utilizando una investigación de legalidad. La SFP exclusivamente ha entorpecido el procedimiento y no decide sobre este asunto.

¿Reta entonces a la Función Pública a que por fin decida al respecto?
No solamente la retamos, estas quejas se pusieron por escrito desde enero, desde la dirección de la Función Pública, pasando por todas las dependencias del Órgano Interno de Control, tanto de México como de Monterrey. Con esto queda comprobado que la única finalidad de las auditorías es desvirtuar el beneficio y el ahorro que brinda el combustible alterno, hostigando y amenazando a funcionarios públicos, deteniendo los pagos y violando el contrato.

¿Usted dice que algo raro hay detrás de esto?
Bueno, antes de que se usara nuestro combustible se consumían 50 millones de litros en las centrales eléctricas, después de usar el combustible de nosotros se usaban 20 millones de litros, eso quiere decir que hay una diferencia de 30 millones de litros. ¿Dónde están? Definitivamente se usaban para otro destino o se sustraían de las centrales…

Es decir, es difícil de explicar esta diferencia que hay de litros…
Es muy difícil, porque la muestra es de cuatro años en el primer caso del uso del diésel y de tres años en el segundo. Entonces, hay una diferencia de 30 millones de litros que al precio actual del diésel estamos hablando de 300 millones de pesos al año.

¿Aquí alguien se está enriqueciendo con esos litros faltantes?
Definitivamente. La respuesta del IFAI es muy clara en el sentido de que CFE quiere seguir utilizando el combustible debido al ahorro que han tenido. Pero, repito, desde el momento en que el Órgano Interno de Control y la Función Pública no tomen una decisión no existe funcionario que pueda volver a regresar al uso del combustible.

¿Diría que el secretario Salvador Vega Casillas está involucrado?
Eso lo tendrá que responder él. Pero lo cierto es que los retiros de diésel de la CFE en todo el país se han incrementado, son enormes, y no corresponden con el consumo de las carboeléctricas.

Víctor Hugo Michel