Comunicado del SME


La Ira de los Sinvergüenzas

A las organizaciones sindicales, sociales y políticas,
A los organismos de derechos humanos,
A los medios de comunicación nacionales y extranjeros,
Al pueblo mexicano,
Salud:

Ciro Gómez Leyva fue al desquite. Unas horas después. Su coraje, en la tinta mercenaria de Carlos Marín cobró venganza.

Jesús Alcalá, ingeniero egresado del IPN, con 32 días de Huelga de Hambre, le increpó. “Ciro si tu dices que esta Huelga de Hambre es una farsa, sostenlo, y vente ocho días, las 24 horas aquí con nosotros a no comer”.

Cinco minutos después, en Milenio TV, Ciro Gómez Leyva reconoció que no simpatiza con nuestro movimiento. Indignado por el hecho de haberse presentado la entrevista de nuestros compañeros, en transmisión directa desde la huelga electricista en el Zócalo, reclamó objetividad de los medios y deploró que los medios de comunicación como el suyo, tan fácilmente calumnien. Con la amarga sopa de su propio chocolate, delatado y rabioso, amenazó con la venganza y la ira de los sin vergüenzas.

Carlos Marín, el arlequín de Felipe Calderón salió a desquitar la publicidad gubernamental invertida en Milenio. Como siempre, en su acostumbrada mediocridad y pedantería, que para el caso es lo de menos, sale a defender a su cachorro Gómez Leyva. Sabiondo se pregunta, ¿cómo no se han muerto los huelguistas que juegan a la vida y la muerte? El “doctor” Marín valora los daños del ayuno huelguístico. ¿Que porqué no se ahogó la Dignidad? ¿Que porqué no dejo de respirar la Esperanza? ¿Que porque antes de llegar, la ambulancia no se estrelló en el cerco informativo?

Dicen los Huelguistas del SME, con su vida cenital en sus puños. “Carlos Marín, regresando de la clínica 26 te haremos una visita de cortesía con nuestras esposas e hijos, solo para, desde lejos, repudiar a la obediente serpiente que tienes por lengua, esa misma obediencia servil que desayuna diariamente, en el Sheraton con más de uno de tus clientes.”

Anteayer, los inges, Jesús y Cayetano ganaron el debate a Milenio y con ello la resistencia del SME creció.
Solo una pregunta al “doctor” Marín, ¿de donde obtuvo la información médica de la clínica 26?, ¿se la regaló Daniel Karam, director del Seguro Social o se la robó de nuestra clínica? En cualesquier caso existe delito que perseguir, en tanto información médica confidencial según el Artículo 77 bis 37, fracción X de la Ley General de Salud.

¿Habrá quien lo persiga; estamos seguros que no? El poder no acostumbra a hacerse el hara kiri, ni se castiga solo, al tiempo.

Fraternalmente
“Por el Derecho y la Justicia del Trabajador”
México D.F. a 29 de mayo de 2010
Fernando Amezcua Castillo
Secretario del Exterior