Se cumplen 7 meses de la extinción de LyFC; continua la huelga de hambre
Organización Editorial Mexicana
11 de mayo de 2010
Ciudad de México.- Los trabajadores de la extinta Luz y Fuerza del Centro (LyFC) conmemoraron este martes siete meses de conflicto con el gobierno, que por decreto la disolvió y despidió a 44.000 empleados, con una huelga de hambre que comenzó hace 17 días.
Los trabajadores, que están a la espera de una resolución judicial, reclaman la reposición de sus puestos de trabajo alegando que la medida tomada por el gobierno fue arbitraria y contraria a las leyes.
El 11 de noviembre el gobierno tomó en forma sorpresiva las instalaciones de la empresa con fuerzas federales y luego anunció que la disolvía porque su operación tenía un costo mayor al de la otra empresa estatal que atiende al resto del país, la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Inmediatamente después del despido masivo el gobierno anunció el pago de la indemnización legal, pero más de la mitad de los trabajadores se negaron a cobrarla hasta el momento y comenzaron un proceso de demanda con movilizaciones y reclamos legales para ser restituidos en su trabajo.
El pasado domingo 25 de abril, diez extrabajadores de LYFC se pusieron en huelga de hambre en una tienda de campaña instalada en el Zócalo de la Ciudad de México, frente al Palacio Presidencial, y aún la mantienen, acompañados de otros 83 trabajadores que se han ido sumando a su acción.
Al principio del conflicto, un grupo de mujeres se mantuvo 17 días en huelga de hambre, pero la levantaron cuando el gobierno prometió negociar una solución que los trabajadores dicen que no se ha producido.
El gobierno, que ha llamado al levantamiento de la medida, afirma que hay "instituciones que están resolviendo opciones laborales y productivas", según dijo el subsecretario de Gobernación de Gobierno, Roberto Gil Zuarth.
María del Rosario Higueras, una mujer de 54 años, afirmó a la prensa que mantendrán la huelga de hambre hasta que les devuelvan el trabajo.
