¡¡ Huelga !!
¡O son ellos o somos nosotros!, reza la consigna que enarbola la Asamblea Nacional de Resistencia Popular, es con esta proclama que convocan a una Huelga Política Nacional para el martes 16 de marzo, fecha límite de revisión contractual entre el SME y Luz y Fuerza del Centro, en medio de la vigencia de su materia de trabajo y sendas demandas ante la justicia mexicana de patrón sustituto. El gobierno panista después de una actuación etiquetada, por el mismo ejecutivo federal de ¡Valiente!, pone en juego a su vez, en este año de conmemoraciones bélicas, a los mineros de Cananea cuando la justicia mexicana (o a la mexicana) emite un fallo en contra de su huelga sostenida por más de 30 meses a causa de la precariedad laboral y muerte de 65 trabajadores dentro de una mina propiedad de Grupo México.
Centenares de comerciales del gobierno federal inundan los medios electrónicos, en un intento por fijar su percepción de lo que debe ser la conmemoración del bicentenario de la independencia mexicana (¡que no!, el centenario de la revolución mexicana), uno en particular es digno de comentar: “eres un pueblo inconforme”: en imagen difusa (como si de un mal sueño se tratara) se puede ver a manifestantes con banderas rojas que portan el símbolo del SME, remata el enunciado “pero trabajador”: apoyado con la imagen de un esforzado cargador. Sólo simulación mediática, simulación jurídica, simulación política, simulación histórica, simulación avalentonada del gobierno calderonista. Es pues, que en un acto de rebeldía social de gran dignidad y, este si, de sublime valentía, los convocantes a la Huelga Político Nacional nos invitan a todos los asalariados del país a empuñar la huelga como legitima herramienta de lucha, con la casta que despierta el parafrasear de nuestra historia en defensa de nuestros derechos laborales y sociales.
Realizar un alto en el camino siempre será una decisión inteligente, por lo que la necesidad de llevar a cabo esta huelga el martes 16 de marzo es inminente, más inminente y oportuna aún para el gobierno en turno, para que pueda prestar atención con toda holganza de lo agotadas y caducas que están sus acciones de “poder”. Mañana, ellos y sus voceros mediáticos seguramente nos llamaran violentos, pero que es una huelga sino un acto límite precedente a la violencia, al derramamiento de sangre, un duelo que llama al acuerdo entre las partes, a que Calderón aparte de su cabeza por un instante lo que el cree da legitimidad a su investidura; la violencia de Estado.
¡Todos a sumarnos a la Huelga Político Nacional!, ¡Hagamos homenaje con dignidad a nuestros centenarios históricos!, ¡Desafiemos al poder, el poder somos la mayoría!, ¡Hagamos de esta huelga y las que falten una lucha magnánima por estipular justicia en nuestro país!.
César Sánchez.