Crece la ofensiva antisindical, alerta la Fesebes
Patricia Muñoz Ríos
Periódico La Jornada
Lunes 4 de octubre de 2010
Cierre de centros de trabajo, quiebras fraudulentas, cancelación de contratos colectivos y relaciones laborales, así como multiplicación de los llamados "conflictos de naturaleza económica" son prueba concreta de la ofensiva gubernamental contra el sindicalismo independiente aplicada en los dos últimos sexenios.
Señaló lo anterior el secretario general del Sindicato de Trabajadores y Empleados del Nacional Monte de Piedad, Arturo Zayún González, al tomar posesión como nuevo líder de la Federación de Sindicatos de Empresas de Bienes y Servicios (Fesebes).
Planteó que la embestida contra los mineros de Cananea, el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y los trabajadores de Mexicana de Aviación es reflejo de una política laboral antigremial que pone en entredicho la vigencia de la contratación colectiva auténtica, así como el futuro del movimiento sindical democrático.
"Negociaciones bajo presión"
En el contexto de la 17 asamblea de la Fesebes, en la que también fue nombrado secretario del interior el líder de la Asociación Sindical de Pilotos de Aviación, Fernando Perfecto, y Benito Bahena secretario del exterior, Zayún indicó que otro ejemplo de la política laboral contra los sindicatos es el uso reiterado de los llamados "conflictos de naturaleza económica" para acorralar a los gremios y obligarlos a "negociar bajo presión".
Aunque esta figura está contenida en la Ley Federal del Trabajo –dijo–, literalmente había caído en desuso desde los años 30 del siglo pasado, y hace relativamente poco diversos abogados patronales, con la complacencia de las autoridades laborales, empezaron a utilizar de nuevo ese recurso como arma para romper la bilateralidad de la relación laboral en áreas tan diversas como la Vidriera del Potosí o el sector aeronáutico. "Se llegó al extremo de querer utilizar este procedimiento en el Instituto Nacional de la Industria Nuclear", advirtió.
El nuevo dirigente de la Fesebes destacó que los sobrecargos y pilotos de Mexicana de Aviación se enfrentan a una situación cada vez más compleja por el inicio del concurso mercantil que podría llevar a la quiebra "maquinada" del consorcio y "por la indiferencia de un gobierno al que parece preocuparle poco el destino del sector aeronáutico y menos aún la suerte de los trabajadores".
Advirtió que aparentemente el principal objetivo de la clase política y económica en el poder es eliminar a toda costa las conquistas obreras reflejadas en contratos colectivos de trabajo.